Firma: María del Toral.
Opinión y Toros
Un bajonazo a la libertad, eso terminó por ser el tan esperado cierre de las Jornadas Culturales Taurinas que se han desarrollado en Quito, desde el día 19 del presente mes.
Como cada día en que se anuncia toros, el aficionado se encaminó a la plaza Quito con ilusión de ver una sana competencia entre toreros de la América taurina, se esperaba la comparecencia de toreros de México, Colombia, Venezuela, Perú y dos representantes ecuatorianos.
Pero hete aquí que de una manera absolutamente despótica, la Intendenta de policía de Pichincha impuso su sin sentido y sin más fuerza que la de su capricho, canceló una corrida que estaba aprobada por todos los estamentos que, legalmente, tienen el derecho a sancionarla.
Se impuso el capricho de una mujer que pisoteó cuanto quiso la Constitución de la república, al atentar contra: la patria potestad de los padres de asistir a un espectáculo público, (por tanto de libre decisión) con sus hijos; atentó contra el derecho al trabajo de los toreros y sus cuadrillas, contra el derecho al trabajo de todos quienes hacen negocio alrededor de la fiesta, contra la libertad que tenemos los aficionados de asistir a un espectáculo que nos agrada. Violentó con el mayor de los desparpajos esa tan cacareada palabra que, desgraciadamente en este país es menos conocida cada día, la LIBERTAD.
La Constitución a esta señora le ha servido de pañuelo, si no de algo peor. Y, si no pensó en todas las libertades que arrolló con su sin razón, debió al menos pensar en la vergüenza internacional que representó su despótica decisión ante los matadores que, desde otros países habían llegado a prestar su concurso para el cierre de las Jornadas Culturales. ¿Será que para hacer un “papelón” de este calibre, a Intendenta necesitaba de un foro internacional?.
Hoy el público, dolido ante este flagrante atentado contra sus libertades pedía a gritos que se diera la corrida, que se permitiera la libertad de elegir pero, la única libertad que se pudo ejercer fue la de asistir con rabia y frustración a la primera demostración palpable y directa de que en Ecuador, solo existe la libertad de verla pisoteada. Se gritaron consignas que recordaban a las autoridades que estamos en Ecuador y no en Cuba, que somos ecuatorianos, no cubanos; en clara alusión a la violación de las libertades.
Esta puede ser la punta del iceberg porque, es sin duda el más claro atentado contra las libertades personales que se ha dado. Cierto es que veladamente ya se violenta la libertad en el país, al forjar leyes que atentan; contra la libertad de expresión y la libertad de educación superior, pero hasta hoy las cosas se habían hecho por debajo, con sigilo, como con miedo; hoy fue un ataque frontal, hoy se sacaron las caretas.
Cuando se pretendió denunciar esta aleve agresión ante un medio de prensa que se suponía independiente, el director de noticias de la comunidad de Quito clara y desfachatadamente dijo que: "no se aceptaban ese tipo de denuncias porque esa televisora estaba en contra de la fiesta brava". ¿Se puede designar “eso” como un medio de comunicación?. NO, son simples instrumentos de quienes pretenden imponer la verdad de unos pocos como bandera de la libertad de todos.
Es el momento de unirnos, todos; taurinos y no taurinos (los "antis" ahora mismo, son tontos útiles de quien ostenta el poder), debemos unirnos porque de no hacerlo la única libertad que nos quedará será la de, no ser libres.
N.R. En este festejo debía actuar el matador Alfonso Simpson "Alfonso de Lima", representando al Perú.
Foto: "Alfonso de Lima".