Tarde larga, aburrida y de avisos, con intermitentes pasajes de interés, fue el balance del Segundo Festival Taurino de la Tradición celebrado ayer en la Plaza de Acho.
Con menos mil personas en los tendidos se lidiaron seis reses de Apóstol Santiago, desiguales de presentación, mansos y complicados en general, que impidieron el lucimiento de los lidiadores quienes fueron silenciados y se fueron de vacío, excepto el torero aficionado José Ignacio Bullard, que realizó lo más torero del festejo, perdió premio por la espada y dió la única merecida vuelta al ruedo de la tarde. El matador peruano Freddy Villafuerte, quien celebraba sus 25 años de matador de toros, pudo cortar apéndice pero falló con la espada. El matador español David Gil, quien se despedía en Lima de los ruedos del Perú, pechó con el más malo del descastado encierro y paso desapercibido. El torero práctico ecuatoriano Rodrigo Patiño, de buena actuación, escuchó los tres avisos por no estar acertado con los aceros. El rejoneador aficionado Jaime Tavera, quien alargó excesivamente su participación, y el torero aficionado Enrique Sifuentes pusieron sus mejores esfuerzos para agradar sin conseguirlo, además, de no contar con el material aparente para triunfar.
El balance fue el siguiente:
Jaime Tavera, silencio, tras dos avisos. Freddy Villafuerte, silencio, tras aviso. David Gil, silencio, tras dos avisos. José Ignacio Bullard, vuelta al ruedo, tras aviso. Rodrigo Patiño, pitos, tras tres avisos. Enrique Sifuentes, silencio, tras aviso.
Incidencias:
Se presentó como "invitado" (¿?) el rejoneador aficionado Eduardo Chaman. Actuó como sobresaliente del rejoneador Tavera el novillero Fernando Villavicencio, aunque después quitó en el astado de Sifuentes y terminó de subalterno en las reses del cierre. No se presentaron a actuar los subalternos "Guerrita", "Santi" y Donni Camargo. Salieron fuera de programa oficial los puntilleros Ruben Yovera, padre e hijo. Fueron cogidos sin consecuencias el aficionado Patiño y el subalterno "Castorcito". Otra vez la autoridad, presidida por el regidor Carlos Caballero, lamentablemente no supo serlo.
Foto: José Ignacio Bullard y su padre Alfredo Bullard, otrora destacado torero aficionado (Foto Cortesía: De Toros y Más).
Con menos mil personas en los tendidos se lidiaron seis reses de Apóstol Santiago, desiguales de presentación, mansos y complicados en general, que impidieron el lucimiento de los lidiadores quienes fueron silenciados y se fueron de vacío, excepto el torero aficionado José Ignacio Bullard, que realizó lo más torero del festejo, perdió premio por la espada y dió la única merecida vuelta al ruedo de la tarde. El matador peruano Freddy Villafuerte, quien celebraba sus 25 años de matador de toros, pudo cortar apéndice pero falló con la espada. El matador español David Gil, quien se despedía en Lima de los ruedos del Perú, pechó con el más malo del descastado encierro y paso desapercibido. El torero práctico ecuatoriano Rodrigo Patiño, de buena actuación, escuchó los tres avisos por no estar acertado con los aceros. El rejoneador aficionado Jaime Tavera, quien alargó excesivamente su participación, y el torero aficionado Enrique Sifuentes pusieron sus mejores esfuerzos para agradar sin conseguirlo, además, de no contar con el material aparente para triunfar.
El balance fue el siguiente:
Jaime Tavera, silencio, tras dos avisos. Freddy Villafuerte, silencio, tras aviso. David Gil, silencio, tras dos avisos. José Ignacio Bullard, vuelta al ruedo, tras aviso. Rodrigo Patiño, pitos, tras tres avisos. Enrique Sifuentes, silencio, tras aviso.
Incidencias:
Se presentó como "invitado" (¿?) el rejoneador aficionado Eduardo Chaman. Actuó como sobresaliente del rejoneador Tavera el novillero Fernando Villavicencio, aunque después quitó en el astado de Sifuentes y terminó de subalterno en las reses del cierre. No se presentaron a actuar los subalternos "Guerrita", "Santi" y Donni Camargo. Salieron fuera de programa oficial los puntilleros Ruben Yovera, padre e hijo. Fueron cogidos sin consecuencias el aficionado Patiño y el subalterno "Castorcito". Otra vez la autoridad, presidida por el regidor Carlos Caballero, lamentablemente no supo serlo.
Foto: José Ignacio Bullard y su padre Alfredo Bullard, otrora destacado torero aficionado (Foto Cortesía: De Toros y Más).
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