En honor al Señor de los Milagros se celebró ayer una corrida mixta en la localidad de Arahuay, en Canta (Lima), en la que el novillero peruano Carlos Ramírez "Morenito de Canta" consiguió indultar un extraordinario astado de la ganadería de Santa Rosa de Lima y recibir los máximos trofeos simbólicos. Por su parte, el matador español Octavio Chacón se fue de vacío y su compatriota Sergio Ferrer se hizo de un apéndice. Triunfo grande del ganadero Alfredo Galdós y del novillero "Morenito de Canta".
Con plaza llena se lidiaron cuatro reses de Santa Rosa de Lima (1º, 2º, 5º y 6º), de propiedad de Alfredo Galdós, bravos y de buen juego en general que permitieron el lucimiento de la terna, que de no fallar con el acero se hubieran cortado más trofeos. Fue indultado el burel corrido en sexto lugar, herrado con el número 115, de color negro listón. También se lidió un astado de Corpacancha y otro de Pampagrande según el programa, estos últimos mansos, complicados y peligrosos con presunción de haber sido toreados con anterioridad.
"Morenito de Canta" en su primero bien con capa y muleta ante un buen ejemplar de Santa Rosa de Lima. Los fallos con la espada le impidieron el corte de orejas y se limitó a escuchar palmas. En su segundo, último de la tarde, de la misma ganadería Santa Rosa de Lima, que resulto extraordinario por su bravura, nobleza y calidad, después de faena armoniosa y lucida por ambas manos, a solicitud mayoritaria la autoridad concedió el indultó al astados. Dos orejas y rabo para el novillero que paseo triunfalmente.
Octavio Chacón en su primero de Santa Rosa de Lima le realizó una buena faena sobre ambas manos con series largas y con enjundia, pero falla con el acero y pierde los trofeos, conformandose con los aplausos de la concurrencia. En su segundo faena de aliño ante un complicado manso. Silencio.
Sergio Ferrer, que sustituía al valenciano David Esteve, estuvo lucido en su primero de Santa Rosa de Lima, destacando buenas series sobre la derecha con técnica y buen gusto. Después de pinchar corta una oreja. En su segundo lo vió devolverse a los corrales por tener características de haber sido toreado anteriormente.
Foto: Ganadero Alfredo Galdos y esposa.
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