Ventura cortó las dos orejas al primero, un buen toro de Guiomar Cortés de Moura, con el que estuvo soberbio. Faena de temple, en la que disfrutó del tranco del astado, que le imprimió una enorme despaciosidad a su composición. Destacó la estética y clase natural de su caballo Nivaldo, el más nuevo de la cuadra.
Luego le cortó el rabo al cuarto, un gran toro, muy bravo, de Guiomar, al que hizo una faena excepcional, de las mejores de su temporada. Con Nazarí galopó de costado de forma milimétrica, dando dos vueltas al ruedo para clavar con gran pureza, y Fabuloso realizó quiebros de extraordinario ajuste, sobre todo por cómo ralentizó los tiempos de la suerte.
También Roca Rey cortó las orejas del tercero, toro con teclas al que el peruano formó un lío gordo en terrenos de cercanías. Pudo obtener idéntico premio del que cerraba plaza después de otra rotunda exhibición pero la espada se lo impidió.
Toro muy exigente el segundo, al que Manzanares le apostó mucho. Con técnica y aguante le cortó una oreja. Luego de cortó las dos orejas del quinto, un buen toro de Victoriano al q
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